Si recuerdas el
último artículo finalizaba con este párrafo: “¿Quién decide lo que quieres
albergar en tu corazón? ¿De quién son algunas de las emociones negativas que sientes? ¿Tuyas?
¿De los demás?”(Leer artículo anterior)
Seguro que tu
intuición te ha llevado a pensar que estas preguntas me conducirían a una nueva
reflexión! No te has equivocado, eres muy intuitivo. Felicidades!
Debo confesar que
este artículo me lo han inspirado los clientes del centro durante sus procesos,
en un momento u otro de las sesiones sale a relucir el poder que los demás
ejercen sobre ellos y la manera en que los mismos pueden llegar a conducir sus
vidas.
¿Quién debería realmente
ejercer el poder sobre tu vida? ¿Quién debería decidir cuándo y cómo los demás
pueden incidir en tu vida, en tus decisiones, en tus elecciones…?
Es increíble lo que
el ser humano puede hacer por miedo al rechazo de los demás, me vienen a la
memoria algunas frases de los clientes: “Vivo la vida que quieren los demás, no
la mía”, “Si me muestro como soy, los demás verán que soy inferior a ellos”,
“Los demás dicen que soy insegura…” “Cuando me critican me mato por quedar
bien…” “Tinc responsabilitat amb els demés però no amb mi…”
¿Pero realmente
quién es el responsable de dar ese poder a los demás? Ciertamente, los demás no
tienen ningún poder, se lo das tú y sólo tú!
¿Qué importancia le das a
lo que los demás dicen de ti? ¿Cuántas veces te has planteado si las críticas
de los demás te ayudan a mejorar? ¿Piensas por un segundo que lo que dicen los
demás de ti es cierto, sin cuestionártelo? ¿A partir de aquí, te invaden los sentimientos
negativos sobre ti?
¿Hasta qué punto
eres consciente de que da igual lo que digan los demás? Tú decides permitir lo
que quieres que te haga sentir mal contigo mismo. En definitiva, ¿Qué poder
quieres darle a los demás, opinen lo que opinen de ti?….”Nadie puede hacerte
sentir inferior sin tu consentimiento”.
Entonces, ¿Quién
tiene el poder?... ¿Cómo puedes saber que todas las críticas sobre ti son ciertas? ¿Te
ves capaz de cambiar el pensamiento de los demás sobre ti? ¿Cómo puedes hacerlo
para gustar a todos a la vez? Aprende
a escuchar a las personas que te pueden ayudar a mejorar, no a dar el poder a
quién no corresponde.
Mediante un proceso
de coaching aprenderás a no dar poder a los demás y a dártelo sobre todo a ti y
a darlo a quien tú quieras y en el momento que quieras.