Escribía al
final del último artículo: “Sólo cuando seas consciente del potencial existente
en ti, podrás sorprenderte con los logros que vas a alcanzar” (Leer artículo anterior)
Desde el
último artículo hasta hoy, ¿ya eres consciente de tu potencial? Felicidades a
todos los que mediante vuestro proceso de coaching personal estáis adquiriendo
conciencia de todo ese potencial Entre los muchos logros que estáis
consiguiendo hay uno muy importante para seguir creciendo: “Dejar de compararos
con los demás”.
Todos hemos oído
o pronunciado la frase: “Es
que no deberías compararte con los demás” y el consejo: “Sé tú mismo o cree en ti”.
La verdad sea dicha, esto no sirve de nada.
Cuando no
se tiene conciencia de ese potencial, resulta casi inevitable compararte con
los demás. Y yo me pregunto: ¿Eres de esas personas que muy a menudo te estás
diciendo “es mejor que yo”, “es que tiene buena suerte”, “por más que me
esfuerce no voy a conseguir lo que él”…?
¿En qué
forma el compararte con los demás aumenta tu autoestima? ¿Cuándo te
comparas quedas en posición de superioridad o de inferioridad? ¿Qué efectos
suele tener este hecho en tu vida? ¿Cuáles son las causas que te llevan a
compararte? ¿Falta de seguridad? ¿Baja autoestima? Ocurre que cuando no
valoramos como suficiente nuestra capacidad o conocimiento a la hora de actuar,
buscamos personas con las que compararnos, ya sean de nuestro entorno inmediato
o no. ¿Y como te sientes cuando son los demás los que te comparan con otros?
A pesar de
ello, no olvides que TÚ, como los demás seres humanos, tienes muchas
características, unas te ayudan a crecer, mientras que hay otras que a menudo
te dificultan alcanzar tus objetivos y te llevan a compararte con los demás. ¿Qué
es lo que quieres cambiar para dejar de compararte con los demás y ser de una
vez por todas, tú mismo?
¿Te
atreves a cambiar las características que te dificultan conseguir tus objetivos
y a compararte únicamente contigo mismo, una vez hayas efectuado dichos cambios?